Esta mañana visité Las Tablas. Hemos coincido varios vecinos de la localidad que no hemos querido dejar pasar la ocasión de conservar una imagen de Las Tablas nevadas. Me podía haber cruzado con Ángel Novillo y habernos saludado, pero no ha sido así. Ángel se fue para siempre el pasado viernes. Para siempre permanecerá su espíritu agarrado a las alas de cualquier ave que elija Las Tablas para descanso, nidificación o como lugar de estancia permanente. El recuerdo de Ángel se mecerá al son del viento entre la masiega y nos alentará para no desfallecer en el empeño de conservarlas en su máximo esplendor.
Ángel Novillo fue un joven amante de la naturaleza que falleció el pasado viernes. No conocí su obra fotográfica hasta hoy, gracias al enlace que puso Anzaga en su blog. No quiero dejar de pasar un momento más sin dedicar a Ángel la mejor fotografía que conseguí esta mañana ni poner la dirección de su web para que se conozca su gran trabajo fotográfico.